Por ALEXIS
Yo envidio al que muere, pienso que se gano el derecho a descansar en paz.
- Padre ¿por qué me has abandonado? - decía el crucificado, al fin y al cabo ¿qué hace el padre? nada. Yo procuro andar atento a ver si no me muero antes de mi cumpleaños todo para ver tu mensaje lleno de pretensión... hasta quizá tener de ti un instante de felicidad... Pero que va! si morirse no es tan malo, quizá sea como irse en un sueño y ya no pensar más... como el orgasmo más suculento y tenaz a tu lado... como decirte que te amo con toda la rivalidad sucinta, con ese miedo a que seas tú la que me ha de matar con una sonrisa, con esa apariencia tierna o con un despertar (a mi lado)... Lo que me resulta ácido es que me tenga que ir y dejarte aquí... hasta quizá imagino desde allá arriba poderte espiar desnuda, no sé, esto es paradójico, deambular, zozobrar y no tener la culpa de nada...
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