Por MALEV
Me gusta el sexo, debo declarar, aunque diga usted ¿y a quién no?, pero mi hambre sexual no es desaforada, ni por estar "necesitada" voy a ir a descuidar mi salud, ni las buenas maneras a la hora del acto. Así como que tengo claro que debo cuidarme para no salir "preñada" (odio esa palabreja). Lo que si me saca de quicio son esas practicas que se comentan sirven de anti-concepción de emergencia siendo que los susodichos pajaritos no se cuidaron y ¡zas! la crema innata. Prácticas en la mujer que van desde acostarse boca abajo por 4 horas, hasta una ducha vaginal con una Coca-Cola (No volveré a consumir ese producto), así como también introducir en la vagina antibióticos y otros utensilios de diversos usos menos para eso. Esto solo para decirles que la píldora del día después es económica y su comercio es muy difundido hoy en día. Hay que ser una dama en la calle y en la cama y quitarse el velo del tabú sexual, yo digo que si en el medio oriente en países árabes, las mujeres se les somete a maltratos entre ellos a llevar tapada la cara, en el occidente parece también cruel que se les use y someta sexualmente. Sé que no es la época de tratar estos temas pero no sobra la prevención antes que la lamentación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario