Por MaLeja
Será una condena,o quizá es que aún no aprendemos, los niños que siguen muriendo de hambre, los asesinos que siguen matando por un par de zapatos o un celular, los niños, las mujeres los animales, todo se perpetua en la violencia que parece fluir por nuestras venas igual que nuestra sangre. La corrupción que carcome peor que caries, y la tolerancia que no aflora. Qué materia prima hoy tienen los eruditos escritores para matizar realidades y si bien la culpa pasa de mano en mano se dice que son las madres las culpables de que la generación haya crecido tan diezmada por el odio y por la pobreza. O ¿Quién cree usted que reproduce esta infamia?. Yo defiendo a la mujer desde mi posición feminista, aunque sean precisamente las mujeres quienes se encargan de descalificar mis palabras. Estoy un poco cansada de que las mujeres no denuncien a sus agresores y ocurra que yo por hacer un favor termine siendo la mala del cuento. Mi tolerancia se ha visto a prueba al punto de decir ¡ya no más!.
Así que mi relevo ha llegado y por un tiempo incierto este sitio será alimentado los lunes y viernes por los textos de Charlie y Alejandro que darán rienda suelta a las mil y una aventuras en que fuimos cómplices y a la vez hermanos y amigos. Les recomiendo mucho leer los martes, miércoles y sábados los textos en el Blog de mi amiga del alma Yania http://seczoologico.blogspot.com/ y no perderse en este Blog los jueves la fenomenal columna "Memorias de un Contador Público Nadaísta".
Suceda lo que suceda será hasta muy pronto.
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